5 abr 2008

Barcelona

Al final iba a ser verdad: Barna tiene algo, y lo estoy comprobando.


Una canción, cinco músicos y tres amigas. Hoy, no necesito más para sonreír.


El viento sopla; quizás sea por la alegría. Cae el sol del cielo lentamente. Nos acarician las sombras. Y mi pelo baila al ritmo del cajón flamenco, mi respiración tiembla con la guitarra y mi voz canta con la trompeta.


La música suena distinta… Barcelona huele a recuerdo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

AAAY QUE RECUERDOS TAN BONITOS LEYENDO TODAS TUS HISTORIAS Y YO ESTANDO TAN LEJOS. QUE SEPAS QUE AQUI JUNTOS, GENCI Y YO ESTAMIOS CERCA TUYO. TE QUEREMOS Y ESPERAMOS VERTE MUY PRONTO, MUUUAAA!!